“y al vivir en Dios, nuestro amor crece hasta hacerse perfecto. Por lo tanto, no tendremos temor en el día del juicio, sino que podremos estar ante Dios con confianza, porque vivimos como vivió Jesús en este mundo.”
1 Juan 4:17 NTV
Déjame decirte que Dios ya te perfeccionó al hacerte cristiano. Él ya puso Su Espíritu junto con tu espíritu. Y para entenderlo mejor es como un walkie-talkie (El Espíritu Santo) en donde el Padre y el Hijo se comunican contigo (Juan 16:13).
¿Y cuánto amor tiene Jesús? Cuando caminó en la tierra hablaba de compasión, de bendecir a su pueblo, sanidades, liberación y también hubo destellos de como amaría al pueblo gentil (personas no judías). Jesús es la expresión de amor y de salvación en dar su vida por los demás.
Ahora… ¡Él ya te salvó! El día del juicio ya tienes seguro tu lugar en el cielo pero como vivimos en Dios, debemos vivir impregnados de su esencia. A donde sea que vayamos, el amor de Dios debe ser reflejado. ¿Estás pasando un tiempo difícil? Pregúntate el qué haría Jesús en esta situación.
Oración: Padre, imprégname de tu amor, que a donde vaya todos puedan ser contagiados de tu presencia, pueda yo demostrar ese amor a mi alrededor y me ayudes a hacer algo por alguien en este día. En el nombre de Jesús, Amén.
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